La naturaleza humana esa abierta e implica siempre tener que hallar soluciones para vivir. Donde los animales no dudan sobre cómo vivir y multiplicarse, cada ser humano ha de desarrollar su personal modo de entender el mundo y la vida. Somos una anomalía fascinante de la Naturaleza. Con un sistema instintivo que no está cerrado y completo como lo está el de los demás seres vivos, sino abierto e incompleto, nos vemos lanzados a la continua aventura de terminar de constituirnos y encontrarle sentido a la vida. Para nosotros la creatividad es un reto natural, una creatividad que en los humanos se incrementa y exacerba hasta, a veces, hacernos perder pie y enloquecer.

Entiendo la locura como un producto estéril de la creatividad. Ambas tienen mucho que ver, y cuando los profesionales tratamos procesos de locura debemos poner mucho cuidadoso en no sofocar la creatividad de nuestros pacientes. En mayor o menor medida, la genialidad es patrimonio de todos, y ya se sabe que genio y locura se dan la mano. Por ello, la ayuda terapéutica a una persona no puede consistir en ‘normalizarla’ y adaptarla a las reglas sociales al uso, sino en descubrir juntos cómo puede desarrollar su personalidad única y ayudarla a que ese desarrollo sea armónico en su interior y con los demás.

Junto a lo humano como tal, también me ha interesado siempre el lenguaje, la comunicación, la escritura. Mis primeros estudios universitarios fueron de filología inglesa y me pasé a psicología cuando caí en la cuenta de que me pasaría la vida enseñando inglés.

La psicología ofrece vías de indagación para buscar respuestas y hacer nuevas preguntas sobre la naturaleza humana, la creatividad, el desarrollo exitoso y los fracasos.

La licenciatura en Psicología, una intensa e ininterrumpida formación en clínica y someterme personalmente a diversos tratamientos de psicoterapia para poner en orden mis demonios personales me fue capacitando para abrir mi propia consulta a finales de los 80. Me especialicé en psicodiagnóstico y compaginé la consulta con peritaciones judiciales e informes de psicodiagnóstico de la personalidad. Trabajé con un equipo norteamericano que investigaba el test de las manchas de tinta (Rorschach) traduciendo sus clases y seminarios en Madrid y luego traduciendo al castellano de sus obras. Así me introduje en el mundo de la traducción y la publicación científica.

Fundé la editorial Psimática en 1990, especializada en temas de psicología (www.psimatica.com). Psimática ha ido creciendo y ha publicado medio centenar de obras que se venden en todos los países hispanohablantes. Gestionada por psicólogos, publica obras sobre psicodiagnóstico, clínica, infancia, sexología, psicoterapia, teoría del apego, psicoanálisis, etc.

El Aula Virtual de Psimática imparte cursos online: profesionales de Europa y América imparten, supervisados por la dirección del Aula, docencia especializada a estudiantes, psicólogos, psiquiatras, pedagogos, maestros, padres, etc.

Me resulta enriquecedor compaginar la consulta con las labores editorial y docente.


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